10 segundos de libertad
Ese caballero aseguró que me estaba dando probablemente la mejor noticia de mi vida. Una sonrisa idiota surcaba su cara mientras insistía en mi buena fortuna. Después de sesudas reflexiones,…
Mil trescientos cincuenta y dos
Ya han pasado dos meses desde mi último ataque de pánico. He conseguido rehacerme después de muchos días llorando en casa y lamiendo mis heridas, y ahora parece que al…